18 jul 2010

Arte para liberarte

Una de las primeras cosas que notamos ni bien pisamos Londres fue la cantidad de coloridas esculturas en forma de elefante que poblaban la ciudad. Rapidamente nos enteramos que se trataba de la Elephant Parade, algo similar a la Cow Parade de hace algunos años en Buenos Aires, pero con otra causa: evitar la extinción del elefante en Asia.

Había tres formas de colaborar: comprando la mega escultura (que es más o menos del tamaño de nuestro departamento), comprando una miniatura ya pintada por alguien más o participando de un workshop en el que uno podía pintar su propio minielefante. Conseguimos un solo lugar en un workshop porque estaba todo agotado y, tras una semana de enfermedad y encierro, mi primera salida fue para pintar un elefante.

Jampy me presiono un poco recordandome que teniamos que ponerla en el living (?). No creo que sea digno de living, pero nuestro pequeño elefante me recordó que soy feliz pintando.



No hay comentarios:

Publicar un comentario