El otro día identifiqué una nueva manifestación de mi estructura estructurada: me gusta seguir la guía. Y es así como me pierdo de mil elementos que tienen que ver con la atmósfera de una ciudad y que frecuentemente no figuran en el librito amigable. Es cierto que nunca fui turista en una ciudad durante tanto tiempo (vamos a sacar Boston de la lista porque es discutible) y que cuando se tienen pocos días la guía es importante para no perderse lo indispensable (ahora no sé si es la estructura o el sentido común hablando).
Digo todo esto para explicar por qué me divirtió la idea de JP de ir poniendo pins en un mapa a medida que íbamos conociendo los distintos barrios de Londres. Sigue teniendo estructura el asunto, no lo niego, pero me alienta a visitar barrios absolutamente fuera del circuito obligado y calles que no están incluidas en el walking tour sugerido por la Lonely Planet.
A ver si dura... en una de esas lo aplico también para Boston!
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